Abril 20
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
1 CORINTIOS 3:10-11 ESPERANZA PARA EL MATRIMONIO: ELIGIENDO EL FUNDAMENTO BÍBLICO
“Es erróneo tener la esperanza que su matrimonio funcionará si cada cónyuge elige desarrollar su relación matrimonial de acuerdo con sus ideas e ignorando o rechazando los principios divinos que son esenciales para construir una relación fuerte y saludable. “
Para que tenga éxito toda gran construcción se debe edificar sobre cimientos firmes y el único cimiento que permite soportar las tormentas de la vida son los principios y doctrinas reveladas en la Palabra de Dios. Sin un cimiento seguro, toda construcción es defectuosa y débil y no se mantendrá en pie porque los cimientos no pueden soportar el peso que se le impone. El matrimonio debe ser construido sabiamente sobre el mejor fundamento. Se necesita una base segura para ir edificando las difíciles relaciones matrimoniales. Solo un buen fundamento ayudará a que su matrimonio se mantenga firme a través de las tormentas que en forma natural todo matrimonio debe enfrentar y podrá continuar por la fortaleza y protección que tiene.
Tanto las dificultades como las alegrías, los éxitos y los fracasos, los aciertos y los errores agregan una dura carga al matrimonio. Por ejemplo, una dificultad financiera en el matrimonio puede traer mucho estrés y tensiones difíciles de enfrentar. El embarazo, el descubrir diferencias que no había tenido en el noviazgo, las dificultades para tomar decisiones y aun la noticia de tener un bebé y la llegada de éste a cambiar todas las prioridades, horarios y la cercanía del matrimonio, son pesos muy difíciles de llevar.
Como puede ver, cada situación viene con sus propios desafíos que pueden cimentar el matrimonio al elegir la unidad o pueden derribarlo al elegir el antagonismo.
Es esencial entender la realidad y no olvidar que somos seres humanos pecadores con formación e ideas distintas y necesitamos aceptar nuestras virtudes y defectos, y llegar a acuerdos bíblicos y profesionales si queremos desarrollar sanas relaciones conyugales. Su meta debe ser tener una relación matrimonial saludable y para ello debe prepararse bíblica y responsablemente porque todo blanco es equivocado cuando en la práctica no tenemos un blanco. Toda meta en la vida conyugal es errónea si no determinamos la meta que estableció Dios quien instituyó el matrimonio. De nada nos sirve tener un mapa, si no sabemos dónde nos encontramos, pero tampoco nos sirve de nada, aunque sepamos con claridad donde nos encontramos si no sabemos hacia donde realmente queremos dirigirnos. Si usted no desea estudiar y obtener una profesión, no importa cuántos libros lea o cuantos consejeros le guíen, sin interés, nunca lo logrará. Si usted no desea tener un matrimonio saludable y aprender y hacer todo lo que es esencial para tenerlo, nunca lo tendrá.
Es imposible tener una saludable relación conyugal, sólo. El matrimonio fue creado por Dios para que un hombre y una mujer se unan en una relación de amor y basados en las ideas del Creador. Si juntos no determinan que desean tener un matrimonio al estilo divino, ningún consejo les funcionará pues nadie puede aplicar principios que no le interesan. Marido y mujer deben establecer que el fundamento de su relación matrimonial no serán sus ideas o las ideas de la sociedad sino el fundamento divino que nos revela la Palabra de verdad.
Compromiso:
Señor, me comprometo a estudiar para conocer cuales son los materiales del fundamento matrimonial que Tú estableciste y a ponerlos como el fundamento de todas mis relaciones.
LECTURAS BÍBLICAS: 1 Corintios 3:10-11,1 Corintios 10:4