Octubre 30

Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.

2 CORINTIOS 13:11 DETERMINO VIVIR LOS CONFLICTOS SABIAMENTE PARA NO VIVIR EN CONFLICTO NECIAMENTE

“La falta de sabiduría para enfrentar los conflictos no solo nos mantiene en los conflictos, sino que nos impide vivir en paz con el Dios sabio que nos ordena saber enfrentarlos bíblicamente y nos da todo lo que necesitamos para vivirlos inteligente y exitosamente.”

Existe una gran diferencia entre vivir un conflicto y vivir en conflictos. Todo ser humano normal experimentará conflictos. Para no vivir en conflictos debemos aprender a vivir sabiamente en medio de ellos cuando aparecen. Quien vive un conflicto lucha con un problema y busca soluciones para pasarlo bien, quien vive en conflicto es un problemático que en vez de arreglarlos los crea o los mantiene. De ambos se constituyen nuestras congregaciones. Existen personas a quienes los conflictos les llegan, y existen otros quienes buscan los conflictos. ¿Se ha preguntado usted, alguna vez, si es un hombre que enfrenta problemas o un problemático?

Hay personas maduras que tienen paz en medio de los conflictos y otros necios que viven en conflictos y no experimentan la paz. Las personas maduras a pesar de los conflictos tienen paz con Dios, paz con otros y paz consigo mismos. Las personas inmaduras y problemáticas, en los conflictos culpan a Dios, a otros o se culpan a sí mismos de culpas que no tienen y no tienen paz con nadie. La paz no es el resultado de la ausencia de diferencias o producto de la unanimidad o uniformidad de criterios. La paz es el resultado de aprender a vivir con nuestras diferencias y de aprender a respetar los criterios y acciones que difieren de nuestro punto de vista. Aunque uno viva en medio de los conflictos, puede tener paz. La paz no es algo que exigimos, sino algo que buscamos.

La Biblia nos enseña que Dios es un Dios de paz y que demanda que aun en medio de los conflictos seamos agentes de paz. Pablo después de corregir y dar instrucciones a los cristianos de Corinto, termina su carta con estas importantes palabras: “Amados hermanos, termino mi carta con estas últimas palabras: estén alegres. Crezcan hasta alcanzar la madurez. Anímense unos a otros. Vivan en paz y armonía. Entonces el Dios de amor y paz estará con ustedes.” (2 Corintios 13:11)

Viven en conflicto quienes no han sido entrenados, no han querido estudiar cómo enfrentar los conflictos, o cuando estudian no han querido practicar. Vivimos pacíficamente en medio de los conflictos quienes estamos preparados para que cuando estos llegan no solo pasamos por ellos, sino que salimos mejores, pues por nuestra sujeción y obediencia y respeto por otros el Dios de paz estará con nosotros. Pablo dice: “No dejen de poner en práctica todo lo que aprendieron y recibieron de mí, todo lo que oyeron de mis labios y vieron que hice. Entonces el Dios de paz estará con ustedes.” (Filipenses 4:9)

El cristiano sabio decide vivir los conflictos, reconocerlos, enfrentarlos y pasarlos con sabiduría. El cristiano inmaduro vive enredado en conflictos o creándolos por no ser sabio para saber resolverlos.

Compromiso:

Señor, determino que haré todo esfuerzo para vivir los conflictos sabiamente y no vivir en conflicto porque actúo neciamente.

LECTURAS BÍBLICAS: 2 Corintios 13:11, Filipenses 4:9

Leave a comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *