Septiembre 25

Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.

1 CORINTIOS 10:31   SEÑOR: RESUELVO ENTENDER EL ÉXITO COMO LO ENTIENDE DIOS

 “En forma natural y por nuestro enfoque en lo temporal, los cristianos creemos que el éxito es tener fama, dinero y poder. Para ser exitosos en el Reino de Dios debemos entender cómo Dios define la vida exitosa para así poder vivir esa vida grandiosa.”

Si el cristiano cree que será exitoso cuando logre lo que el mundo lucha por lograr para obtener lo que llaman éxito, no ha entendido el Reino de Dios. Vivimos una vida de éxito diariamente como la consecuencia de nuestro emprendimiento para ser lo que Dios quiere que seamos. Somos exitosos diariamente cuando vivimos día a día el propósito que Dios diseñó soberanamente para nuestra vida.

Estas son verdades que deben aprender quienes quieren tener éxito al estilo del Reino.

-No son exitosos quienes tienen una definición errónea de éxito.

“Toda mala definición en nuestra mente nos lleva a acciones y logros equivocados inevitablemente.”

Los pensamientos de éxito generalmente incluyen dinero, influencia, fama y poder. La definición incorrecta de éxito le conduce a la búsqueda de algo que Dios no quiere. Peor aún, puede destruirle en el proceso de querer escalar en la búsqueda de poder, pero al estilo del mundo, pisoteando a los demás. Puede motivarle a ganar dinero aun rompiendo reglas de integridad y aun puede a los ministros motivar para obtener dinero de la gente manipulando con ideas no bíblicas de prosperidad. Puede motivarles a querer ser conocidos y famosos para tener seguidores, poder, andar rodeado de guardaespaldas y creer que ocupa el lugar de privilegio que no le pertenece y solo pertenece al Señor.

-Son exitosos los que en vez de seguir ideas humanas siguen el propósito divino.

“Si Dios es el creador de la vida y le dio sentido y propósito a ella, solo los que siguen el diseño divino y ajustan su vida al plan por Dios diseñado pueden vivir exitosamente realizados.”

Moisés comprendía muy bien cuál era la diferencia de ser exitoso en el mundo y ser exitoso a los ojos de Dios. Él “rehusó llamarse hijo de la hija del faraón. Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar de los placeres momentáneos del pecado.”

Moisés rehusó el poder, la fama, la fortuna no porque no quería ser exitoso. Ya era exitoso de acuerdo con las ideas egipcias y del mundo, pero prefirió dirigir todos sus esfuerzos para comenzar a cumplir la nueva parte del propósito de Dios para su vida y eso le demandó vivir un estilo de vida totalmente contrario al que vivía en Egipto.

¿Quiere ser exitoso? Siga fielmente esta orden divina: “31 Así que, sea que coman o beban o cualquier otra cosa que hagan, háganlo todo para la gloria de Dios.”

Compromiso:

Señor, me comprometo a estudiar bien tus ideas de éxito, compararlas con las mismas y hacer todas las modificaciones para elegir las tuyas.

LECTURAS BÍBLICAS: 1 Corintios 10:31; Hebreos 11:25

Comments (1)

  1. Antonio Alvarez

    Reply

    Como dijo el canto…
    No soy pobre, porque yo soy rico.
    No soy pobre, porque tengo a Cristo.
    Más los ricos sin Cristo son pobres.
    Y los pobres con Dios somos ricos.

    Gracias Pastor

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